La niña o joven que se educa en el Colegio Adoratrices debe identificarse por:
- El compromiso con la institución y la lealtad a los principios y valores del Colegio ante propios y extraños.
- El amor como actitud fundamental hacia Dios, a sí misma, al otro y al mundo.
- La formación sólida en los principios del evangelio y su relación de pertenencia con Jesús que modele todas sus demás relaciones.
- La capacidad de tomar decisiones acertadas frente a las dificultades que cotidianamente se le presentan.
- La solidaridad frente a las dificultades que viven sus compañeras, demostrando un espíritu de servicio, apoyo y colaboración.
- La puntualidad, responsabilidad, sinceridad y buen trato.
- La capacidad de participar democráticamente en la vida institucional.
- La conciencia crítica y moral como espacio de formación en la libertad y la responsabilidad.
- El reconocimiento de la familia y la comunidad como ámbitos obligados de realización de la persona.
- El aprecio al trabajo y a la capacitación como posibilidad de superación personal y mejoramiento de la calidad de vida.
- El sentido de pertenencia a un grupo social que la comprometa a participar en su organización y desarrollo económico y político.
- La admiración y aprecio por la identidad nacional, los valores culturales y riquezas naturales de la propia nación.