ANTOLOGÍA POÉTICA

selección de escritos realizados en el área de Artística con el fin de incentivar y estimular la creatividad en las estudiantes. “Por que son incontables los viajes, los paisajes y las culturas que generosamente la imaginación me ha permitido conocer”

Un día común y corriente, solo, en una habitación sala, sentado frente a la ventana observando la suave brisa cayendo en las calles, varias sombrillas abiertas y cayendo a sus costados gotas de agua. Detrás de mí, manchas de pintura, roja, azul, verde, colores alegres estampados en el suelo y al fondo, un retrato, retrato que cree de un sueño, árboles en sus lados, amarillo, color predominante, todo muy claro y simple, pero en su centro un punto negro, oscuridad miedo.

12:30 am, frio soportable, pensando que melodías podrían estar ocurriendo en este momento, no se hace presente el sueño ni las ganas de soñar, preguntas pasando alrededor de mi cabeza, preguntas que me invaden día y noche, ¿de donde provengo?, ¿Cuál es la razón de mi corta memoria y que mis recuerdos sean cortos? Mi mirada fija en el techo y una lágrima recorriendo mi mejilla dejando un camino húmedo sobre esta, mis oídos cerrados ante cualquier sonido, ante cualquier palabra, ante cualquier cosa.

Izquierda, derecha, no logró obtener el sueño, decido levantarme, sentado en la cama visualizo una hermosa tela frente a mis ojos, y bajo ella un paleta junto con sus relucientes colores, uno ,dos, tres pasos dirigiéndome a ella, con mi mano derecha agarro el pincel y lo humedezco de la reluciente pintura color azul, escasos sentimientos para plantear el pincel a la suave tela… no puedo hacerlo, nada de ideas , mi mente en blanco… suelto el pincel, este rebota haciendo caer pequeñas gotas de pintura sobre la superficie del suelo, inútil simplemente inútil.

Mismos pasos anteriores, pero ahora hacia atrás, sentado en la cama mirando mis manos detenidamente, ¿Qué pasa? ¿Dónde quedó aquella inspiración que me hacía pintar hermosos paisajes? Donde el sol brillaba y sus rayos daban color a las flores plantadas en el pasto verde y abundante, animales recorriendo aquel paisaje y una cascada con hermosas aguas cristalinas, que se visualizaban las diferentes especies de peces, y tamaños únicos, un suave calor invade mi piel , caminando sin rumbo y la mirada perdida en alguna parte pero esta reacciona al sentir un fuerte golpe sobre mí, y un leve dolor al caer al suelo, levanto  mi mirada, una chica diciendo algo, me levanto y salgo rápidamente de aquel lugar dejándola sola.

Agitado y con gotas de sudor recorriendo mi frente, mi corazón acelerado y falta de aire, descanso sentándome en la silla frente a la ventana, ventana con superficie rota, y una pequeña mancha al lado izquierdo, telarañas rodeando las esquinas de estas y un candado en el centro de ella.

Mi respiración se a calmado a una moderada, doy un sorbo al vaso de agua que agarro con mi mano, vaso transparente que me permite observar detenidamente lo que posee en su interior, agua, agua que refleja la luz, luz borrosa, no me permite ver detalladamente, pero si diferenciar las formas que posee y refleja esta.

El día a finalizado, los rayos del brillante sol a terminado su trabajo, sigue la luna, la que nos da luz en la noche fría y oscura, está oscureciendo, mi vista no logra visualizar los objetos de la habitación, enciendo la lámpara de mi costado y miró fijamente el gran cuadro blanco y vacío, sin ninguna superficie que lo posea. Sin más que hacer, vuelvo a acercarme al él y con mi mano temblorosa doy paso a mi siguiente obra.

En mi mente hay sola imagen. Imagen que refleja mi mente como tipo 3D, línea curva, mi primer trazo, tonos claros, sombras, tonos oscuros, verde, color principal en esta parte, listo, siguiente paso, dos esponjosas partes y arriba una nariz perfecta, cejas negras y largas pestañas, humedezco de nuevo el pincel uniendo varios colores hasta el color perfecto, castaño, un largo cabello castaño invade su cabeza y en las puntas de este, rollos definidos, un corte excepcional y un aroma reconocible, su piel clara, suave ante mis ojos, en su cuello tenía puesto un collar , mismo que llamaba mucho la atención, cadena de oro  y en su punta un pequeño diamante, su sonrisa, sonrisa única, reflejando de esta felicidad, alegría y obteniendo un par de hoyuelos que hacía de su cara más tierna e inocente, sus hermosos ojos grandes y redondos junto con su color verde que resalta su rostro, sus mejillas un poco rosas y una leve capa de maquillaje. Por último y no menos importante, su lunar localizado en la parte superior de su ceja derecha.

Sorprendido me alejo de la obra, 11:45pm, impactado por lo que acaba de terminar, ¿Cómo pude hacerlo? ¿Por qué no me costó realizar esta obra?

Cierro mis ojos y por fin caigo en un profundo sueño, dejando aparte pensamientos y preguntas, soltar ligeramente los músculos, relajarme y tener mi mente en blanco, con toda tranquilidad y paciencia le doy paso al descanso, siendo así, una alegría infinita frente de mí.

Lentamente abro mis ojos, borroso al principio, pero más claro después, me levanto y salgo de la habitación dirigiéndome al mismo lugar donde choque con aquella persona.

Dos, tres horas y no aparece, decido irme, pero alcanzó a observar detenidamente que aquella persona se dirigía a mí, con nervios cojo su mano y la llevó directo a mi obra, al llegar, extrañada observa su retrato al costado de la ventana, a paso lento se dirige y frente a él se queda observando, levanta su mano derecha y con la punta de sus dedos toca la parte superior de este delicadamente pasando por cada centímetro de este, su mirada se dirige a la parte de abajo donde se hace presente mi firma y vacío el espacio donde debe ir su firma, coge el marcador y escribe su nombre delicadamente, me regala una sonrisa y se retira de la habitación.

Pasan las semanas, mi inspiración vuelve cada vez que la imagen se proyecta en mi mente y ahora se la forma de expresarme, por medio del pincel, el cuadro y las hermosas pinturas.